Los pequeños muchas veces “prueban” hasta dónde son capaces de llegar. Testean sus límites, y sus conductas para llamar la atención o salirse con la suya pueden resultar problemáticas para ti, o para ellos mismos. Ahora, la ciencia señaló la forma de disciplinarlos que puede resultar efectiva. ¡Descúbrela!
Ni gritar, ni pegarles: con una penitencia puede bastar. Foto: Thinkstock
“Tiempo fuera”
Para disciplinar a un preescolar, los padres deberían tomar en consideración diferentes tácticas, entre ellas, las penitencias y los “tiempos fuera”, halló una investigación presentada en agosto de este año en la reunión anual de la Asociación Estadounidense de Psicología.
Mientras que ciertos comportamientos más inofensivos, como las quejas, podrían ser ignorados, otros, como la agresión física, deberían requerir medidas tales como las mencionadas. “Esto no quiere decir que los padres deban gritar o abofetear a los niños”, enfatizó el profesor de desarrollo humano y de ciencias de la familia, Robert Larzelere, al sitio HealthDay. “Significa que hagan un uso razonable de los tiempos fuera, o de medidas como quitarles un privilegio o un juguete”, agregó.
Corto y largo plazo
Pero los resultados difirieron en cuanto a las soluciones de corto plazo, y aquellas de larga data:
· Para el corto plazo
En niños agresivos o desafiantes, las mamás participantes obtuvieron resultados inmediatos usando la estrategia del tiempo fuera, o de tomar un juguete del niño. En pequeños que solamente se quejaban o trataban de salirse con la suya, esas tácticas no funcionaron, sino que el razonamiento fue la mejor arma. Según Larzelere, para razonar con los niños hay que ser simple, y decirles: “Si no compartes tus juguetes con tu hermana, ella ya no querrá jugar contigo”, por ejemplo.
· Para el largo plazo
Aquellos niños más problemáticos cuyas madres razonaron con ellos con regularidad, 16 meses después vieron mejoras en su conducta, indicó el estudio.
Coherencia ante todo
Durante la reunión, también se hizo hincapié en que la clave para obtener resultados es ser persistente. Es decir, que los padres deberían decidir qué tipo de conducta será digna de un tiempo fuera, y luego ser coherentes con ello. “Cuando un niño cruza la raya, los padres podrían darle una advertencia y, si eso no funciona, entonces deben darle un tiempo fuera”, explicó Larzelere.
La agresión en los preescolares
También puede serte útil comprender el porqué de sus conductas agresivas. Aunque te parezca extraño, estas serían comunes en los niños en edad preescolar, y podrían basarse en miedos, celos, frustración por no poder lograr lo mismo que sus otros compañeros de clase o, simplemente, hambre o sueño, señala el sitio BabyCenter. Lo importante es que, apenas detectes este tipo de comportamientos, reacciones y le hables a tu hijo para darle las herramientas necesarias para expresar sus sentimientos con palabras, en lugar de golpes o agresiones. Y tú, ¿cuál crees que es la mejor forma de disciplinar a los niños? Cuéntanos en nuestro Twitter, EstiloYahoo. @Barbaraine
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