jueves, 2 de julio de 2015

11 diferencias entre lo que esperas de tu relación y lo que sucede en realidad



El chico de mis sueños será muy cariñoso y me colmará de detalles, nunca discutiremos, nos gustarán las mismas cosas… ¿Cuántas veces te ha pasado que has imaginado tanto cómo sería tal o cual experiencia que lo que esperabas no ha coincidido con la realidad? Nos guste o no, eso es algo que también sucede con las relaciones, una faceta de la vida sobre la que depositamos grandes esperanzas y que hemos dedicado horas y horas a imaginar. Y es que, en la mayoría de los casos, lo que imaginamos que será nuestra relación no tiene mucho que ver con lo que finalmente vivimos cuando encontramos al chico de nuestros sueños. Hoy te contamos algunos de esos pequeños “desengaños” que todas, o casi todas, hemos vivido cuando la relación con nuestra pareja ha dejado de ser una fantasía, para hacerse realidad. 1.- El primer beso no será tan perfecto: En la mayoría de los casos, las escenas de película romántica no tienen lugar en la vida real y los primeros besos no siempre salen tan bien como habríamos deseado. Sin embargo, lo que sí es cierto, es que sea cómo sea ese primer beso, nunca lo olvidarás y será seguramente uno de los que más disfrutes de los que te dará tu pareja.

2.- Sus amigos no siempre son todo lo ideales que debieran: Pero ten en cuenta que, probablemente, tu pareja también se había imaginado a tus amigas de otro modo. Una vez que los conozcas bien, seguro que son incluso mejores de lo que esperabas. 3.- Su familia no siempre te acepta tan bien como en las películas… ¿Quién no recuerda lo bien que aceptan a Sally en “Mientras dormías”? Lo cierto es que encajar en la familia de tu chico suele ser un poco más difícil, fundamentalmente, porque no suele responder al patrón que te has imaginado de ellos. O lo que es lo mismo: su familia no será una fotocopia de la tuya ni tan alegre y jovial como en “La tribu de los Brady”. 4.- … Ni su madre será tan bruja: Normalmente, las madres de las parejas son el miembro de la familia más temido. ¡Relájate! Lo único que una madre quiere para su hijo o hija es que sea feliz. Si ve que tú quieres conseguir eso mismo, no os costara llevaros bien.

5.- Las discusiones sí llegarán: ¿Cuántas veces creíste que tu nunca discutirías con tu pareja? Todas lo hemos pensado alguna vez. No obstante, al final en toda relación llegan las discusiones. No solo es totalmente normal sino que también es bueno que sea así. No siempre se puede estar de acuerdo en todo. 6.- En vuestra intimidad, no siempre seréis tan románticos ni pasionales como se ve en el cine: Solo te diremos que les pasa a todas las parejas. 7.- Tu chico también tendrá defectos: Descubrirás que el hombre ideal para ti no tiene porque ser perfecto. La buena noticia es que aprenderás a adorar sus defectos. 8.- El romanticismo estará presente casi a diario: Es muy probable que no sea así, pero eso te hará valorar más esos momentos en los que, sin venir a cuento, tu chico aparezca con un detalle o haga el gesto más romántico del mundo.

9.- No siempre tendréis las mismas aficiones: ¿Quién no se imagina que a su chico le gustará lo mismo que a ella cuando piensa en la relación ideal? Aunque al final, pocas veces sucede, lo bueno es que las diferencias enriquecerán vuestra relación.

10.- La rutina también llegará a vuestras vidas: No lo interpretes como algo malo, sino como una evolución de la relación hacia una etapa más sosegada, pero no por ello menos bonita ni intensa. 11.- No será cómo esperabas, sino mejor: Pese a que no todo saldrá como habías imaginado, lo que sí puedes tener seguro es que, si tu chico es el ideal para ti, tu relación será mucho mejor y te hará sentir mucho más feliz de lo que habías previsto. ¡Solo disfruta! Y tú, ¿incluirías algún elemento más en esta lista?

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