martes, 2 de julio de 2013

Danilo y el marketing:

TIENE REVERSA.- La situación de la oposición es peor si el gobierno tiene su propia reversa, como acaba de demostrarlo al posponer el cobro del aumento en la placa. La medida forma parte del paquete aprobado en la reforma tributaria y la pieza, si se recuerda bien, navegó sin dificultades como los barcos de vela cuando tienen el viento a su favor. Pudieron haberse negociado amparos, como la ley de partidos, por ejemplo, pero no, en la intimidad todos los sectores consideraron que era justo que la administración mejorara sus ingresos ante el fatalismo del déficit creado por el régimen anterior. Ahora aparece el presidente Danilo Medina como padre comprensivo y dice que el castigo no será hoy, sino mañana, y todos aplauden. El gesto fue de prudencia, evidentemente, pero también de solvencia. Las arcas no estarán llenas, pero tampoco vacías. Y de algún modo el negocio de la reforma fue bueno. Como consideré entonces, el gobierno se puso más chiquito de la cuenta para que lo cargaran, y con lo que consiguió, y buen sentido del ahorro, no sufre estrecheces... SE FUE ALANTE.- La suerte que se da ahora, de un gobierno que responde más a sus propios frenos que a las presiones que puedan originarse en el exterior, hace más difícil el papel de una oposición que no se organiza debidamente ni llena su cometido. El alza en la placa y el contagio del verano brasileño era una oportunidad, pero la autoridad máxima del país no solo fue prudente, sino rápida. Si se producen declaraciones, no serán a favor del pueblo, que se salvó a tablitas, sino de reconocimiento al gobernante que supo ponerse a la altura de las circunstancias. No le mató el gallo en la funda a sus oponentes, pero tampoco se dejó coger asando batata. No se tenía nada preparado, la verdad sea dicha, y al parecer porque nadie se recordaba del cambio de marbete. Incluso, da para pensar en un guión. Los responsables de cobrar impuestos cargaron el ambiente, con su fatídico anuncio, pero nada más que en apariencia... EL BUEN EJEMPLO.- La realidad fue que crearon un escenario de granada sin espoleta para que el mandatario mostrara su valor y la devolviera a su lugar y evitara un posible estallido social. Las Casandra que gustaba mencionar Joaquín Balaguer no llegaron a hacer fallidas profecías. Fue, si se quiere, un marketing perfecto. Mejor de ahí, y se daña. Ahora, ¿qué pasará en el 2014, cuando se quiera aplicar el nuevo estatuto a las placas y las condiciones no sean tan favorables como ahora para que el gobierno lo asuma? A largo plazo, según se atribuye a uno de los padres de la economía, la humanidad entera estará muerta. La gobernabilidad, por otra parte, opera de acuerdo al día a día, y la gloria de cada administración estará en tener respuestas cuando se produzcan las preguntas. El país no vive la época de las vacas flacas, aun cuando se use la situación económica de excusa, y el gobierno tampoco. Se aprieta el cinturón, es verdad, pero era porque lo tenía muy suelto. Además, siempre ayuda dar el ejemplo. No se le puede pedir sacrificios a la población, si los gobernantes se regodean en el dispendio... PAN Y CIRCO.- El marketing fue perfecto, insisto, aunque fuera una versión moderna de lo que permitió a los césares consagrarse en la antigua Roma: pan y circo. El gobierno deja que mil ochocientos millones de pesos sigan en manos de la gente, al no cobrar el impuesto adicional a las placas. Que es --como decir-- no quitarle el pan de la boca. Pero no debe olvidarse que antes el gobierno había dado circo al producir cambios en los mandos de la Policía Nacional y Dirección Nacional de Control de Drogas. Era justo que se hicieran, la ley los imponía y la población los esperaba, pero el mandatario sabía, porque existe todo un código al respecto, que entre las virtudes de sustituir altos cargos están las habladurías que se producen. “La gente se entretiene con eso”, y si bien es verdad que no hay a quien le den pan que no coma, conviene dar uno que otro espectáculo. No de leones comiéndose a los cristianos, pero sí de cabezas que metafóricamente ruedan...

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